XV Festival “Pensar con Humor” 2022.

 Por: Candelaria Saldaño Vicente.

Durante los días 21, 22, 23 y 24 de julio se presentó la segunda parte del XV Festival “Pensar con Humor” 2022, cuyo lema fue “El humor se ríe del humor…”. Asistí a gran parte de los espectáculos que se establecieron en el Teatro Real y en la Capilla del Buen Pastor, ambos espacios de uso cultural situados en Córdoba Capital.

Al presenciar sus espectáculos y talleres/conversatorios me surgieron varias preguntas sobre las particularidades del humor propio de Córdoba y como hacemos ejercicio de ello en la actualidad.

¿Por dónde pasa el humor en Córdoba? 

Cuando se discute los límites del humor, hay una frase prefabricada indicando que  "se puede hacer humor con cualquier cosa pero el chiste tiene que ser bueno"... Lo cual puede ser cierto, pero está claro que es un pensamiento subjetivo. ¿Qué tiene que tener un chiste para que sea bueno? En la actualidad, se puede hacer chistes sobre cualquier cosa pero no cualquier persona puede hacer chistes sobre cualquier cosa. Y es muy simple: quienes son judíos/as pueden hacer cualquier chiste sobre ser judíos/as; las personas gays pueden hacer cualquier chiste sobre ser gays, y las mujeres pueden hacer cualquier chiste sobre cómo es ser mujer… Pero no se pueden intercambiar tanto esas cosas. Ese es uno de los límites. 

Malena Pichot dice que los componentes de un chiste son bardeo, verdad y acertijo. El acertijo es lo que hace al chiste que sea chiste, sino pasa a ser simplemente una reflexión. Es lo que se conoce como la vuelta de tuerca, que es como armas esa premisa para que quede bien con ese remate. Si bien el remate es algo que la gente se ve venir, el acertijo hace que no estés tan segura/o de que va a venir eso. Por ahí pensar en cómo armar el chiste es pensar en cómo armar un acertijo, o tal vez, cómo armar un juego de misterio con las palabras y agregándole humor más que miedo.

El chiste no siempre tiene que ser contra algo o contra alguien. También puede existir esos chistes "pavos" sin alguna referencia contundente. Se suele decir que lo ideal es “pegarle” al victimario y no a la víctima. Lo cual está bien, en teoría, pero ¿qué sucede? si nos pasamos haciendo chistes sobre una sola persona únicamente, todo se vuelve un embole total. Esta observación se hace luego de saber que por muchos años, en términos de "humor" se le pegaba a la víctima.

A veces la bajada de línea puede ser interesante o llamativa siempre y cuando no haya solemnidad en el humor, claro. No tiene que existir la intención de salvar el mundo, es una cuestión de tiempo y espacio, de acción y reacción. Por ejemplo: en el stand up. Está bueno que la gente reflexione, pero lo más importante es que la gente se ría, no debe ligarse a que sólo prevalezca el mensaje. Todo lo contrario, no se apunta a dejar un mensaje, se apunta a que la gente se ría y que el subtexto sea el mensaje. Hay que pensar en algo que te de gracia, algo que habilite a quien está espectando a crear un imaginario que complete lo que estás queriendo transmitir. Los mensajes van a salir solos, no hay que imponerlos porque la gente se aburre. 

La idea y lo complejo es el acertijo. Cuando el mensaje está tan claro y puesto, no causa gracia y la gente se aburre… Es fundamental crear sorpresas. Hay una diferencia entre el humor involuntario y la improvisación inesperada. En la segunda acepción hay sorpresas, por ejemplo: en “Sexo a gusto” La Bicho (Carla Dogliani) tiene programado abordar ciertos temas en conjunto con la Dra. Bazan Quiroga, pero en el momento de estar en escena, ya sea por la afectación generada por el mismo público o por los imprevistos en escena, su espontaneidad y frescura le permiten generar sorpresas en sus humoradas que el público no se ve venir y causan gracia (carcajadas múltiples). 

¿Estereotipos? 

Hay una idea establecida en la que el estereotipo per se es malo. Y para el humor es fundamental. Si bien, hacer humor puede provocar generalizaciones, también es necesario recordar que todas/os representamos algo. Todos/as pertenecemos a un grupo social de algún tipo. Yo, por ejemplo, soy una chica de barrio, nacida y criada en Córdoba capital, en barrios comunes y silvestres como lo son San Vicente y Altamira. Y todo esto es UN punto de vista. Entonces, no es que hay una sola forma de entender todo o de interpretar todo para cada persona individualmente. Hay puntos de vista por grupos sociales, y los grupos sociales están repletos de estereotipos. Y obviamente que, para hacer humor, hay que buscar la empatía, el reconocimiento y demás, tenés que apelar a estereotipos. Es mentira que las personas somos únicas. A la mayoría nos pasa lo mismo y la mayoría pensamos lo mismo sobre ciertos temas… y ahí es cuando se generan las fricciones de cualquier tipo. Incluso no de humor, pero ahí está la clave.

        El estereotipo no es malo per se, sino que hay que saber que existen ciertos rasgos peyorativos de ciertos estereotipos que son lugares comunes y del horror que es ahí donde no hay que caer.

¿De qué nos reímos cuando nos reímos?

Volviendo al debate de los límites del humor, generalmente se cuestiona ¿de qué nos reímos? 

Conscientemente no decidimos de qué nos reímos. Si te da gracia, te da gracia. La risa no es una cuestión intelectual, te pasa o no te pasa, es algo orgánico. Por ejemplo: el Mudo Esperanza en la “Maratón del humor” hizo un relato donde él personificaba a un borracho y fue estupendo, todo el público emitió grandes carcajadas por la calidad de lo que estaba viendo. Es ahí, también, cuando nos damos cuenta que no le hace falta caer en la vulgaridad para hacer reír. 

Es preferible tomar un estereotipo desagradable y ridiculizarlo antes que tomar ese mismo estereotipo y romantizarlo, hacerlo “adorable”. Y ni hablar cuando un humorista intenta explicar que él “no está en contra de esta gente de la que se burla”, hay algo que está mal y él mismo no lo quiere comprender pero porque sinceramente no empatiza con eso, no comprende otras realidades. 

A veces lo que te está interpelando en la vida te sirve. Se hace humor sobre ciertos temas con más soltura porque son situaciones que te están pasando. Chule Reynoso en la “Maratón del humor” contó un chiste sobre una situación marital:...- “El champú de ella no hay que tocarlo porque es caro. El tío nacho. El mío es plusbelle. Tengo olor a compota en la cabeza todo el tiempo”- Ojalá pudieran haber escuchado el estallido de las carcajadas al unísono cuando él contó eso. Fue el texto pero más aún fue la forma en que lo dijo. Una vez más, este comediante, demuestra que no le hace falta caer en la burla obscena, en la comparación ordinaria y mucho menos en la grosería.

Actualizar el material es necesario porque no podemos hacer de cuenta que los años no pasan. En “Sexo a gusto” o como me gusta decirle: la clase de Educacion Sexual Integral que todo el mundo necesita, La Bicho (Carla Dogliani) interviene con gracia y elocuencia con el pensamiento que el común de las personas sostienen y muchas veces no se animan a decir o preguntar, lo cual provoca gracia inmediata.

Féminas y el stand up: ¿Qué lugares ocupan las féminas dentro del humor?

El stand up es más “nuevo”, la terminología lo es pero antes que este concepto se legitimara mundialmente, a este tipo de performances se reconocían pero con otros términos. El café concert estuvo antecediendo a todo esto. Una de las primeras mujeres en habitar el café concert fue Edda Díaz, actriz y comediante nacida en Tucumán. Otra de las humoristas que supo ocupar lugar en la escena nacional en televisión y teatro es Gabriela Acher, actriz y comediante que eligió el terreno del humor a través de unipersonales en los que tiene un relato base donde manifiesta su lucha contra el machismo, la cosificación de las mujeres, el mandato de la maternidad.

Ni siquiera hace falta mencionar al feminismo, no hace falta. Ni utilizar terminología actualizada sobre los modismos de definición de género, porque seguimos hablando de lo mismo, el sistema sigue oprimiendo y hay que hablar. No es que “bueno ahora que salió la ley del IVE, listo. Haremos chistes de…moda” no. Ahora que estamos más juntas y ahora que si nos ven, podríamos reírnos de nosotras mismas, está bueno que pase porque sino es una solemnidad espantosa, digo debemos aprender a reírnos de eso pero sólo las femeneidades pueden hacerlo. Lo cierto es que las féminas no fuimos educadas en el humor… pero lo bueno es que las mujeres vamos recuperando nuestro lugar dado que cierto imaginario va desapareciendo porque tarde o temprano, los dinosaurios comienzan a desaparecer.

Florencia Ordoñez, Malena Vieytes, Lara Carignano, Mariel Soria y La Bicho fueron en esta edición del festival incorporaciones de gran valor. Cada una con su propia impronta y relato mantuvieron una calidad escénica espontánea que permitía sostener la atención y disfrute del público durante todo el espectáculo.  

Temáticas que no. Cambios de paradigmas.

Hay que dejar de hacer chistes “bullineros” que sostienen la burla y el bardeo solo porque sí. Hay que saber afinar la sensibilidad. 

Lo que sí es cierto es que hay algo que se transformó (y se sigue transformando) y es verdad. Hay chistes que ya no dan gracia y forman parte del horror. ¿Por qué en pleno 2022 tenemos que seguir escuchando "chistes" o "humoradas" repletos de misoginia, machismo, transfobia y muchas otras cosas que eran más comunes durante los años ochentas y noventas? Acaso todos los días tenemos que recordarles que ya no está bueno (nunca lo estuvo) hacer chistes con connotaciones sexuales, criticando apariencias físicas, que no da decir "puto" o "los travestis" ¿Por qué tengo que escuchar que un humorista conductor se burla del estado físico de la Mona Jimenez? ¿Por qué tengo que escuchar a otro humorista diciendo “El viagra se llama Ni una muerta más”? Sabiendo lo que en la actualidad significa agarrarse de un lema de lucha y militancia en contra de los miles de femicidios que existen. ¿Por qué tengo que escuchar que otro de los humoristas hace referencia a la sexualidad de Lizy Tagliani? Pasa directamente a ser un hecho inadmisible, vulgar que no condice con lo que podemos brindar. A esos “humoristas” les pregunto: ¿qué clase de pensamiento con humor estamos proliferando? ¿Qué clase de trabajadoras/es de la cultura estamos siendo en favor de nuestra sociedad? Las personas que están sobre un escenario, en este caso los/las comediantes, tienen, directa o indirectamente, un rol social, una función social formadora, por eso es tan importante que estén en constante reflexión sobre lo que eligen reproducir.

Hubo otro humorista en la “Maraton del humor” que dijo “John Lennon era ciego sino cómo es posible que se haya enganchado con semejante bagarto” y él mismo también mencionó “La bigamia esta prohibida porque no hay hombre que soporte dos suegras. Yo a la mía la quiero como un tesoro... Enterrada en una isla” Otra vez los chistes sobre suegras. La risa por parte del público disminuyó considerablemente. ¿Hasta cuándo pretenden sostener esa clase de “humoradas”? No subestimen al público. Un chiste no puede cambiar el mundo, pero debemos comprender que tomar ciertos temas para darles cuerpo en escena es político, y no estoy hablando sobre cuestiones partidarias, cada quien decide qué cosas reproduce y qué cosas no.

Escuchar a otras personas te habilita a comprender otras realidades. Hay algo que ya no está bien hacerlo, hay que prestar atención a eso y hacer notar por qué no está bien sostener ciertos discursos, eso le sirve al/a la humorista y nos sirve a todos/as.

Entonces, ¿cuáles son las claves del humor? Tal vez, podría decirse que comienza con reírse con los demás y no de los demás. El mundo sigue siendo el mismo, lo que cambia es el paradigma, y si seguimos sosteniendo discursos antiguos dentro de nuestra profesión, nuestro quehacer se limita.

¿Miedo a los nuevos paradigmas?

Hay comediantes que han tenido “temor” en el momento de mostrar su repertorio. Muchas veces por el nivel de agresividad que se maneja en redes sociales y hasta por la cultura de la cancelación. Hay que saber bancar la parada. 

Hay que saber utilizar la creatividad y sortear el conflicto. No se pretende tener una postura moralista pero hay que ver por qué decimos lo que decimos, de dónde viene lo que decimos, en dónde está la diferencia de lo que intentamos comunicar. Hay que investigar… Los/las humoristas tienen la obligación de investigar. Escuché a uno que dijo “Uy ahora no se puede decir nada…” y no es así. Se les solicita que revisen, estudien la situación, que intercambien pensamientos con otras personas para volver a la realidad que existe HOY. Cada quien elige qué cosas decir y en donde posicionarse dentro de la profesión.

El humor debería retratar las situaciones que nos interpelan. Establecer vínculos es vital. Pensar en temáticas en las que se pueda contemplar situaciones que lleguen a las personas. 

¿Está bueno usar el humor para bardear o insultar?

Esto es una estrategia antiquísima. El tema es cuando es solo bardeo y no da gracia. ¿Qué se quiere hacer con ese chiste? Hay comediantes que, en nombre del "humor negro" hacen chistes dolorosos. No debemos hacer "chistes" dolorosos. El error suele estar cuando el humorista se olvida de que tiene que ser gracioso y está intentando ser trasgresor. Si no es gracioso, no interesa. En la “Maratón del humor” hubo un humorista que hizo un chiste bastante gerontofóbico donde señalaba el peligro de contraer ACV (accidente cerebrovascular) de las personas de cierta edad… Hizo ese chiste con un público en donde gran parte de las personas tenían entre 60 y 80 años aproximadamente. En ese momento me pregunté ¿con qué necesidad? Yo no alcanzo esa franja etaria y me molestó mucho, además de darme vergüenza ajena.

Espectáculos y comediantes a destacar

Cuando se arma la carcajada al unísono es un monstruo increíble del que todas las personas somos parte. La carcajada colectiva es algo incontrolable y visceral, algo que es hermoso. Es lógico, de alguna manera si algo/alguien me hace reír hay algo que queda muy agradecido en una, internamente, por eso, quisiera mencionar a: “Hasta la victoria, always” (Florencia Ordoñez), “Corazon Idiota” (Malena Vieytes), “XX, XY” (Alejandro Orlando) , “Cuidado con el perro” (Azul Teatro), Marcos Ontiveros, Chule Reynoso, Mudo Esperanza, Flaco Peña, “Lara deja de actuar” (Lara Carignano) y “Sexo a gusto” (La Bicho y la Dra. Bazan Quiroga).

A pesar de haber destacado a ciertos comediantes de la “Maratón de humor”, no quiere decir que no hayan tenido, en sus discursos, referencias racistas, misóginas y transfóbicas. Pero ahora elijo destacarlos por su trabajo corporal y gestual, porque es muy bueno. Ellos han sabido adaptarse al tiempo escénico con picardía desde el cuerpo y, realmente, durante esos momentos han causado alegría y gozo entre el público presente.

Mención especial

Agradezco haber tenido la oportunidad de poder presenciar las performances de Norma Mujica, Adelina Constantini (ambas actrices en "Cuidado con el perro") y Julio Vaca Chicharrón (comediante en la "Maratón del Humor"). Tres grandes de la escena local que al día de hoy sostienen una presencia escénica impactante. Habitan el escenario con temple, prestancia, delicadeza, precisión, sensibilidad y humor incomparables, sin incursionar en extravagancias ni artificios. Qué hermoso fue verles. Que hermoso fue escuchar y presenciar el arte y el amor que le dan al quehacer teatral y la energía que nos transmiten a quienes espectamos. Muchas gracias.

Corolario

Por haber señalado ciertas cosas en las que, como artistas, debemos trabajar continuamente no dejo de tener en cuenta que todo esto, lo que hemos visto y lo que elegimos ver, está directa e indirectamente sujeto a cada una de nuestras subjetividades. De acuerdo con una tallerista del festival, podría “pecar de agelasta”... Me parece importante no generalizar y mal utilizar un término patológico al tildar a alguien de “agelasta” solo por hablar sobre aquellas cosas que lejos de avanzar, atrasan; solo por diferir en el pensamiento. No se puede tildar a alguien de “agelasta” solo porque opina diferente, entonces antes de hacer ninguna mención al respecto es necesario que cada quien vuelva a revisar su situación y estado de privilegio permanente que no le dejan ver las realidades diversas y las alteridades. No todo el mundo tiene sus oportunidades. 

A su vez, hay que tener capacidad de reírnos de todo (no reírse de todos) porque cuando la gente elige ir a verte al teatro es un verdadero lujo, quién no sepa dilucidar eso no sabe nada. Como artistas es vital permanecer en curiosidad activa. La curiosidad nos mantiene despiertos/as. Intentar encontrar un estadio de curiosidad al hacer comedia es base. La curiosidad hace que no se estanquen. Hacer cosas que no hacemos nunca. Investigar sobre nuevos universos, conocer nuevas personas, todo eso ayuda.

Hay infinitas formas de llegar al público. No hace falta caer en la salida “fácil”, en la guarangada, en la excesiva burla hacia el/la otro/a, no suma resaltar la grosería y perpetuar la ordinariez de ciertos discursos que perecen en el tiempo. 

Es de gran valor que exista un festival de esta magnitud. Para esto es necesario estar en permanente reflexión sobre nuestros quehaceres. Una de las cualidades del teatro es habilitar nuevos mundos, nuevos universos o formas de estar que lleguen a las personas para demostrar que están hechas/os de mucho más que algo burdo. Es públicamente conocido el dinamismo que el humor cordobés sostiene, la chispa y el candor que caracteriza a la Docta. Por esto, es que debemos renovar constantemente lo que ofrecemos, por quienes están y por quienes vendrán.

Larga vida al Festival “Pensar con humor” que siempre nos encuentre reflexionando, acompañando y brindando alegría a quienes lo habitan y lo espectan.